En mi segundo día en Guatemala, empezamos con una visita a Lacama (un pueblo rural en las montañas). Para llegar allí tuvimos que conducir por caminos de tierra muy estrecha a lo largo de los acantilados sin barreras (no voy a mentir … que daba miedo).
Muchas de las niñas mayas en esa zona crecen con la idea de que no son iguales a los chicos.
El programa he observado que les enseña a ser fuertes a través de la autoestima, que les ha enseñado a expresarse sin miedo. Hablé con tres mentores de adolescentes, y me dijeron lo mucho que el programa significa para ellos. En sólo tres meses que el programa ha estado en vigor, los cambioshan sido enormes. Las niñas que no quisieron responder preguntas cuando llegaron por primera vez al programa, ahora están enseñando a otras chicas como hablar.
También jugaron, y mientras nos reímos, me acordé de que las niñas son las mismas en todas partes.
In another town, the “Friendly Spaces” program focuses on teaching girls to be healthy and safe. It gives them a place to go after school to be safe, to just be girls, and to plan for their futures.
En otra ciudad, la “Espacios” del programa se centra en enseñar a las niñas a ser sanas y seguras. Se les da un lugar a donde ir después de la escuela para estar seguras, sólo las niñas, y para planificar su futuro.El último programa que se observa hoy un programa de alfabetización. Hablamos de la importancia de la educación, y me enteré de cómo están aprendiendo a leer y escribir, lo que ayudará a mejorar sus vidas para sí mismos y sus comunidades.
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